lunes, 12 de enero de 2009

La propuesta de enmienda

Eleazar Díaz Rangel


Apenas se produjo el anuncio del presidente Chávez de extender el derecho a ser postulado indefinidamente a todos los funcionarios electos, la oposición y algunos comentaristas coincidieron en una sola explicación para el cambio: perdido como estaba en las encuestas por el rechazo a su proposición de perpetuarse en el poder, propuso ampliar ese derecho. La verdad, hay encuestas para todos los gustos, unas dan el triunfo al SÍ y otras al NO.

Esa materia la propuso originalmente el PPT, y hubo partidos opositores que mostraron su acuerdo con una enmienda que no se limitara al Presidente. En el seno del Psuv es verdad que la inmensa mayoría de sus directivos estuvo con la idea inicial, pero sí hubo quienes discreparon.

Posteriormente, la comisión del Psuv que estudia los resultados de las elecciones del 23N en su informe parcial apuntaba a la extensión de ese derecho a la reelección, y simultáneamente, Chavez recibió un memorando donde alguien cercano, pero fuera del gobierno, le abundaba en razones a favor de esa apertura. Estas opiniones y su propia reflexión le llevaron a cambiar su posición, que sorprendió a la dirección del Psuv, y finalmente no fue compartida por toda la dirección de su partido.

Seguramente lo aprobaron convencidos, además de la justicia que encierra que no discriminaba a otros electos, de que ampliaría el espectro de quienes votarían por el SÍ.

Lógico ese razonamiento. Muchos de la oposición verán así alargada su posibilidad de gobernar, o de volver a gobernar, y quizás por encima de las uniformadas voces de los partidos opositores, se inclinarán a votar SÍ, quienes ven cómo gradualmente van abriendo espacios gobernables. Por supuesto esto sucederá en algunos niveles, pues en los superiores predomina su obsesivo odio a Chávez y a todo lo que representa; cuanto les interesa es verlo fuera del poder, o, en lo más inmediato, sin opciones para continuar postulándose, convencidos a su vez de que no tienen cómo derrotarlo electoralmente.


Historia palestina
El 29 de noviembre de 1947, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó la Resolución 181-II mediante la cual partió Palestina en dos estados independientes: uno de 11.000 km² árabe y otro de 14.000 km² judío, y un régimen internacional autónomo para la ciudad de Jerusalén bajo la autoridad de la ONU. La 181 fue aprobada con 33 votos, 13 en contra y 10 abstenciones. La ONU apenas tenía 56 miembros. Los países árabes no aceptaron la partición (Palestina emerge como país luego de la I Guerra Mundial y en 1920 se acordó en una conferencia internacional que quedaría bajo la tutela administrativa de Gran Bretaña).

Se desató una guerra civil que se prolongó hasta 1949. El 20 de julio de ese año, Siria e Israel, creado un año antes, firmaron una tregua. Parece ser el único documento donde los árabes reconocen el Estado de Israel, pero no reconocían sus fronteras.

Sin embargo, en plena crisis de Suez, en 1956 (cuando Egipto nacionalizó el Canal de Suez) el gobierno israelita de Ben Gurión desconoció los acuerdos del armisticio de 1949, decisión reiterada en 1967.

Al calor de las guerras habidas y en su lucha por la independencia, en Palestina se crearon varias organizaciones, entre ellas Al Fatah, dirigida por Yasser Arafat, que después se unieron en la Organización de Liberación de Palestina, la cual es mayoría y gobierna en Cisjordania, mientras una nueva y más radical organización, Hamas, ganó las elecciones en la Franja de Gaza, pero fueron desconocidas por varios países.

En las últimas décadas la cuestión palestina ha estado en el epicentro de las crisis del Medio Oriente. Estados Unidos e Israel han formando una alianza política y militar como nunca o pocas veces ha existido entre dos estados, alianza que parece no será revisada con el acceso al poder de Barack Obama.

El viernes pasado, el Consejo de Seguridad de la ONU pudo aprobar una resolución que ordena el inmediato cese al fuego, la retirada de las tropas de Israel y la entrada de ayuda humanitaria sin restricciones. Contra su posición tradicional, EEUU no vetó la resolución, fue el único de los 15 miembros que se abstuvo. Por supuesto, debió consultarla con Israel, que estaba en negociaciones sobre una propuesta de Egipto. Pero la agresión israelita sigue.


Jesús Arnaldo Pérez, paisano y embajador en Francia, me entregó la sobria y atractiva edición 2009 de la Agenda, esta vez dedicada a los "dix ans de Revolution Bolivarienne", con textos e ilustraciones alusivos. Me habló de la política francesa, y me sorprendió saber cómo están adelantado los preparativos del bicentenario de la independencia en América Latina, seguramente al mismo ritmo de los planes en España que celebrar, desde su visión, la independencia ¡iberoamericana! La sorpresa es porque aquí en Caracas poco se sabe y apenas se habla de tan importante acontecimiento.


Prensa de Puerto Rico apenas informó de la reunión que sostuvieron el jueves en el Hotel de la Concha, en San Juan, dirigentes de UNT, PJ y Copei, un alto ejecutivo de medios, y parece que alguien de la Bolsa de Valores de Caracas, para planificar la campaña contra la enmienda. Con ellos dicen que estuvo John Patrick Caufield, encargado de negocios de la embajada de EEUU, y trascendió que lo que más les interesó es cómo van a distribuir los tres millones de dólares aportados.